22 de septiembre de 2008

Capitulo 3


20 DE OCTUBRE DE 1853

En vista de nuestra boda, y posterior conversión, he decidido instriur a Victoria en la medida de lo posible acerca de su futuro como vampira.
Ella, como la mayoria de gente, tiene unas ideas preconcebidas acerca de diversos mitos, tales como el agua bendita, o los ajos... Sabe Dios a cuantes preguntas he respondido en estos días...
Victoria está ansiosa por conocer mi verdadera historia, la que nunca antes le había contado...No estoy omitiendo ningun detalle, dejando incluso que lea éste diario, para que comprenda que en mi renacimiento, tuve que tomar decisiones difíciles con el fin de garantizar mi supervivencia... La parte más dura es sin duda la muerte de mi padre, de la cual no he dejado de sentirme culpable ni un sólo día...
Es extremadamente compasiva, ésto puede ser un punto a su favor a la hora de evitar carnicerías, o de evitar alimentarse de sus seres querídos.
Ayer estuvimos paseando por Roma con el fin de decidir cuál será el templo en que sellaréroms nuestro amor. Una misión bastante dificil, teniendo en cuenta la belleza de cada construcción en ésta ciudad. Finalmente nos hemos decantado por la iglesia de Santa María in Cosmedin, situada en la Piazza della Bocca della Veritá.

Aún no sé como se la ingeniará para marchar de luna de miel y no regresar jamás...le resuktará duro, pero es necesario para proteger a sus familiares y amigas de sus primeros apetitos de sangre...ya que las primeras presas suelen ser las personas más cercanas al vampiro...

14 DE DICIEMBRE DE 1853

Gracias a mis influéncias he conseguido acelerar los trámites de la boda, nos casaremos dentro de exactamente un mes...
Será una ceremonia íntima, tan sólo sus padres, Alessandro, nosotros, y el padre Gianluca Bravo.
He mandado decorar la iglesia de Santa María in Cosmedin con cientos de rosas blancas, calas y orquídeas.
A la entrada a el templo, sonará el Ave María, cantado por el coro de niños que habitualmente actúan en ésta iglesia.
Ya tengo un precioso anillo de diamantes engarzados en oro blanco, diseñado por mí, y encargado expresamente para ésta ocasión a uno de los mejores artístas joyeros de la ciudad.
Decir que la amo es quedarme corto...de hecho, maldigo al verbo amar por no ser capaz de abarcar todo lo que siento por ella.
Solo una cosa me atemoriza.... la conversión...
Parece un proceso sencillo, tan solo tengo que morderla y beber un par de sorbos de su sangre. En ningún caso debo continuar bebiendo....
La teoría parece sencilla, pero no sé si la práctica resultara igual de básica...
Espero hacerlo bien... la eternidad y victoria, Victoria y la eternidad, y justo enmedio, yo...


14 DE ENERO DE 1854

Si nunca me hubiese transformado, jamás habría llegado hasta ella... la razón de mi existencia, la luz que me ilumina el alma y controla a la bestia de mi interior...la clave de que mi maldición se vuelva bendición...
La mujer más maravillosa de cuantas han nacido desde que el mundo es mundo.
Con unos ojos, que si mi corazón aún latiera, le provocarían taquicárdias. Esos labios tan suaves, tal dulces, que dejan escapar su calido aliento cuando me susurra al oído un ¨"te amo·"...
El aroma a sándalo de su pelo, la delicadeza de su piel, la sinceridad de su voz... ella es para mi, más indispensable que la propia sangre de la que me alimento...
Esta mañana, a las 11 concretamente, ha tenido lugar el acontecimiento más maravilloso y espectacular de toda mi vida...Sé a ciencia cierta que la imagen de Victoria entrando en la iglesia de la mano de su padre, tan radiante, con su vestido blanco de encaje y ese velo que hacía parecer su piel aún mas pálida y hermosa de lo que ya es...
Custodiada por dos largas filas de bancos repletos de calas... con una alfombra roja en el suelo, bajo sus pies.... y el Ave María de Handel entonado con las angelicales voces de los niños del coro de la parroquia... hoy he sabido lo que es que te duelan los ojos a causa de admirar tanta belleza condensada en un instante tan pequeño...

El momento culmen del ceremonia, cuando el cura nos hizo pronunciar nuestros votos... cuando ella me dió su "sí", cuando yo le juré amor eterno...


El banquete ha transcurrido en un restaurante exclusivo de la zona colindante a la piazza espagna, ya que queriamos estar cerca de mi casa, y durante el escaso tiempo que permanezcamos aqui...nuestra casa...

Hace unas horas, he recorrido por primera vez su cuerpo, centimetro a centimetro con mis frios labios, he acariciado cada curva, cada recoveco, cada milimetro como si fuera la ultima vez...
Ardíamos de pasión mientras nos fusionábamos en un solo ser. Mientras ella besaba mi cuello, acariciaba y arañaba mi espalda de puro placer, mientras yo me dedicaba a susurrarle al oído cuánto la amo... hasta notar que sin necesidad de alas, ella ya había llegado al séptimo cielo...
Se recostó a mi lado, jugando con mi pelo entre sus dedos, pero esta aparente calma apenas duró 10 minutos, tas los cuales, posó sus labios en mi pecho, y fué bajando hasta rodear con ellos mi ombligo, recorriendo mis costados con sus dedos, bajando más y más con su cálida boca a través de mi cuerpo...
Cuando su segunda explosión hubo finalizado, me suplicó que la convirtiera... por suerte para mí, el dios Morfeo cumplió con su cometido a la perfección, y la sumió en un sueño profundo y reparador....
Y ahí estaba ella, con su cabeza apoyada en mi pecho, durmiendo como el ángel que para mí és...
Suerte que no he tenido que convertirla ésta noche, suerte que aun me quedan unas horas antes de exponerme ante la diosa Fortuna en ro de una conversión que yo jamás aprendí a ejecutar...
Ahora sólo me apetece cerrar por hoy este diario, acostarme a su lado, y observarla en silencio mientras ella duerme, y sueña con un mañana nuevo... uno que durará eternamente...





15 DE ENERO DE 2854

Empezaba a amanecer cuando despertó...
Su melena revuelta sobre su pecho desnudo fué el más bello regalo que el día podía hacerme. Al fin y al cabo, jamás había amanecido con la persona amada al lado, y éso también resultaba nuevo para mi. Juro que esa sensación me emborrachó de felicidad... Victoria entornó la mirada para no cegarse con la luz matutina, y sus labios dibujaron una preciosa sonrisa, dulce y tierna...tal y como el momento lo requería.

Me besó y abrazó tan fuerte como su condición de humana se lo permitió. Posó sus labios en mi cuello, hombros, pecho, vientre y finalmente, en un derroche de amor, en mi frente.
Entonces, sin apenas darme tiempo a reaccionar, se sentó sobre mi, y atrapando mis manos con las suyas, las posó en sus caderas, que ya empezaban a balancearse en un suave y rítmico vaivén sobre mi. Poco a poco sus movimientos cobraron fuerza, velocidad e incluso legaron a ser algo bruscos. Mientras, su respiración se transformaba en jadeos arrítmicos y sus uñas se clavaban en mi pecho.
Fué en ése momento, inequívoca recta final, cuando me gritó las palabras que yo tanto temía..." estoy preparada cielo, muérdeme...."

Me incorporé como pude, y acerqué mi boca a su cuello. Lo besé y chupé con delicadeza, para acabar en un mordisco que la hizo proferir un profundo alarido, en parte de dolor, y en parte por el placer que le provocó hacerme el amor mientras la mordía...

Saboreé su sangre, tan diferente a las otras, tan especial, rica en matices y en intensidad... Entonces por un instante tuve la sensación de no poder parar de beber, aún a sabiendas de que éso la mataría...me ví como el monstruo que no deseaba ser para Victoria...

Apreté muy fuerte los párpados, destensé la mandíbula y me escabullí de entre sus piernas.
Ella trató de levantarse para detenerme y tranquilizarme...para hacerme ver que estaba bien y que no había rebasado ningún límite. Pero ya era demasiado tarde... mi saliva se extendía rápidamente por su torrente sanguíneo y fué incapaz de mantenerse en pie.
Cayó de rodillas, llorando por la incómoda y sádica sensación de frío que recorría sus venas y arterias. Me acerqué a ella mientras le explicaba que esa sensación era parte del proceso de transformación, que ya se lo había explicado, que no se procupase...
Las primeras horas prometían ser duras, pero eso formaba parte del precio que debia pagar por la eternidad... al fin y al cabo, pronto ya no sentiría nada... y dejaría de ser humana.
Finalmente se desmayó, así que la tumbé en la cama y la tapé con las mantas para que estuviera lo más cómoda posible dentro de su pequeño calvario.

Salí a la calle en busca de lo que ésa misma noche sería la primera cena de Victoria...mi esposa...mi vampira...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

vaya, sigues vivo... claro... eres un vampiro.
pues na, a ver si tienes suerte en Blogger, ke mola bastante mas kel fotolog de los webos.
La mierda es que dejan menos comentarios, pero mira, asi mejor, menos comentarios absurdos i mas comentarios sinceros. Taluegorr.

diariodeunamujersola dijo...

vaya....por un momento quise ser victoria...jejejej
besitos

Fany dijo...

Jo...que intenso este capitulo... bastante sensual y sincero.... lleno d amor =) ...

Un Beso!