30 de septiembre de 2008

Capitulo 5


5 DE AGOSTO DE 1854

Las paredes parecen hablar, las calles escuchan, y para alguien como yo, acostumbrado a seguir rastros en busca de ése "algo más", ha sido muy sencillo enterarme de que la pequeña comunidad vampírica de éste país está sumamente preocupada por los devastadores asaltos que poco a poco han ido sufriendo.

Parece como si algo o alguien estuviera destruyendo a todos los vampiros de España.

Segun parece que éramos unos treinta repartidos a lo largo de la "piel de toro", siempre intentando no llamar demasiado la atención...siempre guardando las formas y salvando las distancias para evitar sospechas por parte de los humanos.

En unos meses 20 han sido eliminados, lo que ha provocado que los Zarruenda, una comunidad de cinco vampiros que habitaban en Zaragoza, se encuentren en el exilio, quizás en Francia.
Victoria y yo los acogimos durante una noche, gracias a lo cual pudieron descansar y recuperar fuerzas antes de seguir con su marcha.

Nadie sabe quién o qué está llevando a cabo semejante holocausto. Lo único seguro es que tarde o temprano vendrá a buscarnos a nosotros, y entonces trataremos de estar lo más preparados posible...

Dicen que un vampiro va adquiriendo habilidades segun madura, y ésto es un hecho contrastado, si comparamos mi fuerza y mi agilidad actual, con la que tenía cuando me converti, cuando mis primeros pasos en el mundo de la sangre acababan de ser dados...
Además, cada vez me resulta más fácil intuír los movimientos de mis presas. Es casi como si me encontrase dentro de sus cabezas, lo que nosotros llamamos, "el séptimo sentido".

Ultimamente cazamos más despreocupadamente, debido a la epidémia de cólera que está barriendo las calles de la ciudad.
Ser inmunes nos otorga la ventaja de poder beber sangre infectada sin riesgo alguno para nuestra supervivencia, y evidentemente, nuestros asesinatos quedan bastante mejor cubiertos de lo habitual.

Aun así, siento lástima por éstos pobres humanos... ya que de no ser inmortal, yo mismo podría ser una de las víctimas de ésta horrible epidemia...

En éste mar de miserias e incineraciones, Victoria y yo somos dos muros irrompibles contra los que la muerte choca una y otra vez, incesante en su empeño por cobrarse dos vidas más. Pero en nuestro caso, la batalla está ganada de antemano.

Aprovecharé la crisis para adquirir propiedades deshhabitadas por la tragedia, y empezaré a construir de nuevo aquel pequeño imperio que ya constituí en Brighton.



16 DE ENERO DE 1855

Ya se acerca...
Sigiloso como pocos, y peligroso como su propia existencia.
Se llama Arthur Black, un vampiro de más de 700 años de antigüedad.
Nació en Liverpool, y fué convertido a los 29 años por su hijo mayor, al cual descuartizó cuando tuvo fuerzas.
Nos enfrentamos a un auténtico asesino implacable, que según se rumorea, elimina a la competencia para controlar todo el territorio español.
España es su coto de caza privado, y Victoria y yo, los último cazadores en activo.

Presiento su llegada... no falta mucho... un par de días a lo sumo.
Estoy listo para luchar hasta la muerte, ya sea la suya, o la mía propia...
Mi único temor es Victoria, mi séptimo sentido me dice que debo preocuparme más por ella que por mí.


25 de septiembre de 2008

Capítulo 4


18 DE FEBRERO DE 1854

Victoria ya es, a todos los efectos, una correcta cazadora. Me encanta su compasión hacia los más debiles.
Hemos acordado alimentarnos con una dieta compuesta en un 50% de animales, y el otro 50% de enfermos terminales, vagabundos y delincuentes.
Ayer mismo acabamos con un violador de niñas que actuaba en las calles de Nápoles.

Si es necesario matar para alimentarse, almenos lo haremos con aquellos que no merecen la vida que les ha sido regalada, o que no dispongan ya de demasiado tiempo debido a su salud.

Me enorgullece ver que mi princesa ha aprenido en un mes a mi lado, lo que a mi me costó cuatro años asimilar solo.

Su transformación duró 26 horas...algo más que la mía.
Los primeros días fueron muy duros para mí, ya que no me resultó fácil verme obligado a atarla hasta que fuera capaz de controlar al depredador que había despertado en su interior.
Su sed de sangre era, como siempre pasa durante los primeros días, demoledora e insaciable. Así que era yo quien me ocupaba de llevar la cena a casa para evitar que perdiera el control en aras de un instinto que aún no sabía controlar.

Pasada una semana, nos dirigimos a Barcelona, nuestro nuevo destino. Mi soñado regreso a mi país se produjo sin contratiempos, cruzando el mediterraneo en un barco , hasta desembarcar en las costas catalanas.
De momento aún no tenemos casa, así que estamos ocupando una antigua masía en tuinas a las afueras de la ciudad condal.
Cuando Victoria sea totalmente capaz de controlar sus instintos naturales nos mudaremos a un piso de alquiler por el cual he hecho una oferta.
Me gustaría que nos estableciéramos en esta ciudad unos años. Es agradable el halo de arte y creatividad que envuelve a cada esquina, cada casa, cada edificio público...

Aquí espero poder pintar nuevos cuadros... echo de menos tener el tiepo y la despreocupación para poder retomar mi pasión por la pintura.
Ojalá Victoria se acostumbre pronto...

¿Qué puedo decir de la vida marital?, ¡es fantástica!. Ambos vivimos en una permanente luna de miel. Despertyar a su lado es la sensación más maravillosa del mundo...soy tán felíz...


11 DE MARZO DE 1854

Ayer estuvimos comprando algunas telas para nuestro nuevo hogar.
El dinero amasado en mis últimos años cunde excepcionalmente. Y cuando nuestra liquidez baje, quizás pueda encontrar algun trabajo como profesor de dibujo, ya que mi destreza con el pincel así me lo permite.

Es también una suerte no tener que comprar víveres, de manera que ese dinero lo destinamos a comprar ropa. No caemos e la fastuosidad que me caracterizó durante mi etapa en Inglaterra, pero no se puede negar, que tenemos un gusto exquisito a la hora de adquirir prendas y demás complementos para nuestro vestuario.

Hoy tenemos planeado pasear por el casco antiguo, curiosear tiendas y buscar una modista que nos pueda confeccionar cortinas, edredones y manteles con las seds, linos y algodones que compramos ayer.

Percibo una cierta tensión en el aire...casi como una descarga eléctrica que salta de átomo en átomo a nuestro alrededor.. no sé qué puede ser, pero me mantendré alerta...

22 de septiembre de 2008

Capitulo 3


20 DE OCTUBRE DE 1853

En vista de nuestra boda, y posterior conversión, he decidido instriur a Victoria en la medida de lo posible acerca de su futuro como vampira.
Ella, como la mayoria de gente, tiene unas ideas preconcebidas acerca de diversos mitos, tales como el agua bendita, o los ajos... Sabe Dios a cuantes preguntas he respondido en estos días...
Victoria está ansiosa por conocer mi verdadera historia, la que nunca antes le había contado...No estoy omitiendo ningun detalle, dejando incluso que lea éste diario, para que comprenda que en mi renacimiento, tuve que tomar decisiones difíciles con el fin de garantizar mi supervivencia... La parte más dura es sin duda la muerte de mi padre, de la cual no he dejado de sentirme culpable ni un sólo día...
Es extremadamente compasiva, ésto puede ser un punto a su favor a la hora de evitar carnicerías, o de evitar alimentarse de sus seres querídos.
Ayer estuvimos paseando por Roma con el fin de decidir cuál será el templo en que sellaréroms nuestro amor. Una misión bastante dificil, teniendo en cuenta la belleza de cada construcción en ésta ciudad. Finalmente nos hemos decantado por la iglesia de Santa María in Cosmedin, situada en la Piazza della Bocca della Veritá.

Aún no sé como se la ingeniará para marchar de luna de miel y no regresar jamás...le resuktará duro, pero es necesario para proteger a sus familiares y amigas de sus primeros apetitos de sangre...ya que las primeras presas suelen ser las personas más cercanas al vampiro...

14 DE DICIEMBRE DE 1853

Gracias a mis influéncias he conseguido acelerar los trámites de la boda, nos casaremos dentro de exactamente un mes...
Será una ceremonia íntima, tan sólo sus padres, Alessandro, nosotros, y el padre Gianluca Bravo.
He mandado decorar la iglesia de Santa María in Cosmedin con cientos de rosas blancas, calas y orquídeas.
A la entrada a el templo, sonará el Ave María, cantado por el coro de niños que habitualmente actúan en ésta iglesia.
Ya tengo un precioso anillo de diamantes engarzados en oro blanco, diseñado por mí, y encargado expresamente para ésta ocasión a uno de los mejores artístas joyeros de la ciudad.
Decir que la amo es quedarme corto...de hecho, maldigo al verbo amar por no ser capaz de abarcar todo lo que siento por ella.
Solo una cosa me atemoriza.... la conversión...
Parece un proceso sencillo, tan solo tengo que morderla y beber un par de sorbos de su sangre. En ningún caso debo continuar bebiendo....
La teoría parece sencilla, pero no sé si la práctica resultara igual de básica...
Espero hacerlo bien... la eternidad y victoria, Victoria y la eternidad, y justo enmedio, yo...


14 DE ENERO DE 1854

Si nunca me hubiese transformado, jamás habría llegado hasta ella... la razón de mi existencia, la luz que me ilumina el alma y controla a la bestia de mi interior...la clave de que mi maldición se vuelva bendición...
La mujer más maravillosa de cuantas han nacido desde que el mundo es mundo.
Con unos ojos, que si mi corazón aún latiera, le provocarían taquicárdias. Esos labios tan suaves, tal dulces, que dejan escapar su calido aliento cuando me susurra al oído un ¨"te amo·"...
El aroma a sándalo de su pelo, la delicadeza de su piel, la sinceridad de su voz... ella es para mi, más indispensable que la propia sangre de la que me alimento...
Esta mañana, a las 11 concretamente, ha tenido lugar el acontecimiento más maravilloso y espectacular de toda mi vida...Sé a ciencia cierta que la imagen de Victoria entrando en la iglesia de la mano de su padre, tan radiante, con su vestido blanco de encaje y ese velo que hacía parecer su piel aún mas pálida y hermosa de lo que ya es...
Custodiada por dos largas filas de bancos repletos de calas... con una alfombra roja en el suelo, bajo sus pies.... y el Ave María de Handel entonado con las angelicales voces de los niños del coro de la parroquia... hoy he sabido lo que es que te duelan los ojos a causa de admirar tanta belleza condensada en un instante tan pequeño...

El momento culmen del ceremonia, cuando el cura nos hizo pronunciar nuestros votos... cuando ella me dió su "sí", cuando yo le juré amor eterno...


El banquete ha transcurrido en un restaurante exclusivo de la zona colindante a la piazza espagna, ya que queriamos estar cerca de mi casa, y durante el escaso tiempo que permanezcamos aqui...nuestra casa...

Hace unas horas, he recorrido por primera vez su cuerpo, centimetro a centimetro con mis frios labios, he acariciado cada curva, cada recoveco, cada milimetro como si fuera la ultima vez...
Ardíamos de pasión mientras nos fusionábamos en un solo ser. Mientras ella besaba mi cuello, acariciaba y arañaba mi espalda de puro placer, mientras yo me dedicaba a susurrarle al oído cuánto la amo... hasta notar que sin necesidad de alas, ella ya había llegado al séptimo cielo...
Se recostó a mi lado, jugando con mi pelo entre sus dedos, pero esta aparente calma apenas duró 10 minutos, tas los cuales, posó sus labios en mi pecho, y fué bajando hasta rodear con ellos mi ombligo, recorriendo mis costados con sus dedos, bajando más y más con su cálida boca a través de mi cuerpo...
Cuando su segunda explosión hubo finalizado, me suplicó que la convirtiera... por suerte para mí, el dios Morfeo cumplió con su cometido a la perfección, y la sumió en un sueño profundo y reparador....
Y ahí estaba ella, con su cabeza apoyada en mi pecho, durmiendo como el ángel que para mí és...
Suerte que no he tenido que convertirla ésta noche, suerte que aun me quedan unas horas antes de exponerme ante la diosa Fortuna en ro de una conversión que yo jamás aprendí a ejecutar...
Ahora sólo me apetece cerrar por hoy este diario, acostarme a su lado, y observarla en silencio mientras ella duerme, y sueña con un mañana nuevo... uno que durará eternamente...





15 DE ENERO DE 2854

Empezaba a amanecer cuando despertó...
Su melena revuelta sobre su pecho desnudo fué el más bello regalo que el día podía hacerme. Al fin y al cabo, jamás había amanecido con la persona amada al lado, y éso también resultaba nuevo para mi. Juro que esa sensación me emborrachó de felicidad... Victoria entornó la mirada para no cegarse con la luz matutina, y sus labios dibujaron una preciosa sonrisa, dulce y tierna...tal y como el momento lo requería.

Me besó y abrazó tan fuerte como su condición de humana se lo permitió. Posó sus labios en mi cuello, hombros, pecho, vientre y finalmente, en un derroche de amor, en mi frente.
Entonces, sin apenas darme tiempo a reaccionar, se sentó sobre mi, y atrapando mis manos con las suyas, las posó en sus caderas, que ya empezaban a balancearse en un suave y rítmico vaivén sobre mi. Poco a poco sus movimientos cobraron fuerza, velocidad e incluso legaron a ser algo bruscos. Mientras, su respiración se transformaba en jadeos arrítmicos y sus uñas se clavaban en mi pecho.
Fué en ése momento, inequívoca recta final, cuando me gritó las palabras que yo tanto temía..." estoy preparada cielo, muérdeme...."

Me incorporé como pude, y acerqué mi boca a su cuello. Lo besé y chupé con delicadeza, para acabar en un mordisco que la hizo proferir un profundo alarido, en parte de dolor, y en parte por el placer que le provocó hacerme el amor mientras la mordía...

Saboreé su sangre, tan diferente a las otras, tan especial, rica en matices y en intensidad... Entonces por un instante tuve la sensación de no poder parar de beber, aún a sabiendas de que éso la mataría...me ví como el monstruo que no deseaba ser para Victoria...

Apreté muy fuerte los párpados, destensé la mandíbula y me escabullí de entre sus piernas.
Ella trató de levantarse para detenerme y tranquilizarme...para hacerme ver que estaba bien y que no había rebasado ningún límite. Pero ya era demasiado tarde... mi saliva se extendía rápidamente por su torrente sanguíneo y fué incapaz de mantenerse en pie.
Cayó de rodillas, llorando por la incómoda y sádica sensación de frío que recorría sus venas y arterias. Me acerqué a ella mientras le explicaba que esa sensación era parte del proceso de transformación, que ya se lo había explicado, que no se procupase...
Las primeras horas prometían ser duras, pero eso formaba parte del precio que debia pagar por la eternidad... al fin y al cabo, pronto ya no sentiría nada... y dejaría de ser humana.
Finalmente se desmayó, así que la tumbé en la cama y la tapé con las mantas para que estuviera lo más cómoda posible dentro de su pequeño calvario.

Salí a la calle en busca de lo que ésa misma noche sería la primera cena de Victoria...mi esposa...mi vampira...

20 de septiembre de 2008

Capitulo 2


7 DE ENERO DE 1852

Me llegan noticias de una serie de asesinatos idénticos a los de Londres en la renacentista Florencia. Y creo que sé de quién son obra....
Debo actuar con rapidez si quiero darle caza, si no quiero que sea demasiado tarde otra vez...El mes que viene me mudaré a Italia, está decidido.
Esta tarde parten hacia allá un grupo de servidores para que me aseguren unos aposentos a mi llegada a la ciudad.
A mi partida, dejaré mis tierras bajo la dirección de Francesc, quizás el chico merezca una oportunidad que por el momento su padre le niega.
A él encomiendo mi fuente de ingresos....que sea lo que el altísimo quiera....y que nos pille confesados....




20 DE ENERO DE 1852

La expedición que envié a Florencia para conseguirme una casa ha regresado con buenas noticias.
Al parecer han conseguido alquilar un piso al lado justo de la catedral de San Marcos, un emplazamiento privilegiado, teniendo en centa la fama que precede a ésta catedral, tanto por su belleza como por su tamaño. Yo jamás la he visto, pero intuyo que debe ser una vista digna de admirar..

También me han informado de que Alessandro DiTagliare, mecenas de artistas y tratante de obras, tales como pinturas y esculturas, será mi cicerone en la ciudad.
Al parecer a éste adinerado burgués no sele ha pasado por alto mi pequeña colección de arte, y estará encantdo de conocer al hombre que ha revolucionado la forma de comerciar en Inglaterra.

Con ellos, ha venido también una joven. No sé cómo lo han conseguido, pero es fantástico.... en los dos días que durará el viaje tendreé oportunidad de aprender el italiano, una lengua muy similar, por cierto, a mi valenciano natal.
Mañana partimos con destino a Florencia, la fecha previamente fijada será adelantada, ya nada me retiene aqui, y en cuanto a Francesc...bueno, estoy seguro de que me echará de menos pero...se acostumbrará.
A él le dejo a la dirección de mis tierras y mi negocio, y además, le he hecho llegar un retrato que me pintaron en las últimas pascuas... sé que sentía devoción por dicha pintura...

Las historias sobre el asesino de Florencia siguen corriendo como la pólvora, y ya se habla de mas de 50 asesinatos en apenas un mes... Marius Ellian parece fuera de sí... ¿cómo puede ser tan estúpico para llamar la atención de los demás vampiros de éste modo?... A no ser que esté planeando algo...



24 DE ENERO DE 1852

Por fín Florencia, o como aquí la llaman, Firenze.Mi nuevo hogar es fantástico. Un edificio de tres plantas justo a la derecha de la parte frontal de la catedral...Que aunque había imaginado hermosa, no es nada comparado con la primera impresión que te embarga al plantarte frente a tan colosa construcción con fachadas de mármol... Tanblanca, tan antigua, tan eterna...como yo...

Anoche, después de cenar, mientras mis sirvientes deshían mi equipaje, subí a la cúpula de la catedral... desde la cual se observa toda la ciudad y las pequeñas poblaciones colindantes
en todo su esplendor. Sinceramente, sobrecogedor...

Mañana tengo una cita con mi particular cicerone para visitar la Galleria Uffizi, lugar de trabajo de Alessandro, pero éso, como bien h dicho, será mañana...
Ahora sólo me apetece callejear un rato. Vagar por una ciudad que aún no he conocido como se merece...Quizás entre sus calles encuentre algun rastro de mi tan buscado Marius Ellian...y si eso ocurriera, sabría que hacer...






1 DE MARZO DE 1852

Alessandro DiTagliagre, mi hombre de confianza desde que estoy aquí, me ha hecho una suculenta oferta para adquirir algunas de mis obras de arte, coleccionadas durante mi estancia en Inglaterra. Desea además incluir el retrato que dejé en mi residencia de Brighton, en el que aparezco sentado en mi butaca de terciopelo rojo sangre. Ésto será para Francesc una prueba irrefutable de que doy por acabado mi paso por Inglaterra.
Deseo además vender mis tierras, ya que desde mi adquisición, se han revalorizado increiblemente, principalmente gracias a qe en ellas se halla una de las mayores productoras de té de las islas...
Quisiera, no obstante, ofrecérselas antes que a nadie a Francesc, ya que la amistad que me brindó, bien merece un trato de favor por mi parte, y evidentemente, a él no se las vendería al precio de venta de la puja, sino al precio real del valor del inmueble...

Alessandro afirma estar preocupado por la oleada de extrañas muertes sucedidas en la ciudad, y claro, a ver como le explico yo que no son obra de ningún psicópata, sino de la necesidad fisiológica de alimentarse de un vampiro centenario e inusitadamente sangriento y despiadado...
Lo mejor será que lo mantenga en la ignorancia, ya que, aunque de ideas liberales, es muy difícil que escuche mi explicación y no me vea como un lunático, o un bromista cínico en el mejor de los casos.
Si el quiere pensar que el asesino es un hombre de buena posición tratando de huir de la monotonía a base de crímenes...allá él... no seré yo quien le abra los ojos.
Debo reconocer que sus retorcidas teorías me agustan... almenos son profundas, rebuscadas y entretenidas...
Esta tarde daremos un buen paseo para acompañar nuestro debate y teorizar sobre las más complejas conspiraciones asesinas de la Florencia actual... Una tarde entretenida al fín y al cabo.

4 DE MARZO DE 1852

Anoche estuve cenando, perdón... me cené... a una preciosa joven de 17 años. Lo más divertido cuando se trata de una joven, és el cortejo. Carlotta, una muchacha de cabello rizado color negro azabache, como pequeños tornados en un dia de tempestad, ojos grandes y con el color de la más cerrada noche, de un negro realmente turbador..que te hace sentir totalmente desnudo ante su mirada. Labios finos y perfectamente humedecidos con su manía de acariciarlos con la lengua mientras habla, y un cuerpo imprópio para su edad...
Parece mentira que ése blanquecino y terso canalillo sea el predecesor de unos pechos perfectamente turgentes, cuya exquisitez sólo se ve superada por unos pequeños y rosados pezones, que, a modo de guindas en un pastel, acaban tan preciosa obra de arte.

Dios...cómo disfruté al acercarme a ella en medio de uan callejuela empedrada del casco antiguo, justo enfrente de una pequeña taberna, y percibir su olor, un sensual olor a jazmín en sus ropas y a limón en sus cabelos...
Deleitarme con su dulce y quebradiza voz de niña pícara, aderezada con uno de los idiomas más bellos de cuantos deben existir...el italiano...
Cómo se aceleraba su pulso cuando, una vez en mi dormitorio, me dedicaba a desabrochar cada lacito de aquel majestuoso corpiño color azul marino y bordado con delicados detalles en hilo de plata... Que tremendo escalofrío subió por su espina dorsal al bajarle el vestido hasta quitárselo por completo, al abrazarla y besarle el cuello, para despues, con toda mi dulzura, recostarla en mi cama....

Prodecí a recorrer con mis fríos labios desde su cuello hasta su pecho izquierdo, homenajeándolo con un tierno beso, y repetir después la operación en el derecho...
Como disfruté al poseerla, por vez primera en su corta vida...y también por última vez...No fué hasta su tercera explosión de sentidos y sensaciones, cuando me decidí a acabar ya con su placentera agonía, y, justo en el momento en el que me llegaba el turno a mi, besé dulcemente su cuello, y ése fué su final...

Lo que siguió a aquel beso fué un desgarrador mordisco, apasionado, loco, casi enfermizo, que hizo que su sangre resbalara por la comisura de mis labios, y se derramara ligeramente sobre la almohada...
Su excitación hacía que el corazón le latiera rápido, y ésto, me obligaba a chupar a más velocidad, ya que la sangre salía impulsada a través de los ventrículos a gran velocidad...No puedo decir que la paladease demasiado, pero sí que fué una cena terriblemente agradable...

Acabado el festín, la metí junto con sus ropas en un enorme saco, preparado para la ocasión, y me dirigí en dirección a un extrremo del Ponte Vecchio, desde donde la lancé al rio...

Ciao Carlotta...fino sempre, píccola...






14 DE JUNIO DE 1852

Olfateé el rastro del vampiro a través de toda la ciudad. Era evidente que acababa de atacar, ya que habia un hedor a sangre en el ambiente, algo imperceptible para los demás, pero no para mí...
El olor a muerte me habia llevado hasta unas estrechas y abandonadas calles del barrio gitano de Florencia... el rastro era más y más intenso, seguramente estaba al girar la esquina de la barbería que se encontraba ante mi...
Ya estaba preparado para abalanzarme sobre él, cuando, de repente, un alarido de dolor atravesó rebotando las paredes de los edificios hasta llegar a mis oídos. Inmediatamente después, un enorme haz de luz anaranjada creció, iluminando sin escrúpulos la calle donde yo me encontraa, y proyectando una silueta en las paredes de mi izquierda...

Me decidí a a girar la esquina y acbar con mis dudas, cercionarme de que todo iba bien... si mi corazón aún latiera, se habrñia parado de pura desilusión.
Frente a mi se elevaba una enorme hoguera cuya combustión era un cuerpo decapitado... no tuve dudas, era Marius Ellian...
El objetivo principal desde que me mordiera y convirtiera en vampiro...mi único foco de venganza...la única forma de sentirme en paz con mi pasado y mi presente... estaba muerto...
Parecía que alguien se había adelantado a mis movimientos... para destrozar 6 años de deseos despiadados de asesinarlo...

No reparé en la silueta que había a un lado de la hoguera hasta que ésta se acercó muy lentamente, paso a paso, y con gran elegancia a mi...
Llevaba una anchísima y gruesa capa de color gris oscuro, impropia sin duda para aquel caluroso mes de Junio... y en su mao derecha, relucía el filo de una larga y rectilínea espada.
Según se acercaba, resultaba más facil distinguir algun rasgo de aquella silueta enigmática que lucía amenazadora con aquella arma fuertemente sujeta, como esperando atacar de nuevo...
Era un varón de unos 30 años, de cejas finas y ojos pequeños, pero de un azul mortecino que sin duda alguna, delataba su naturaleza vampírica. En ése momento se me pasó la irónica idea de un vampiro matando a otros vampiros... ¿Porqué?, ¿Sería una simple cuestion de marcar el territorio y no permitir que otros cazáran en su coto privado?
Le sostuve la mirada alerta, como un gato cuando aguarda el instante preciso para abalanzarse sobre su oponente y arrebatarle el control...

-Il signorino Alberto Ferrer supongo...

[Su fuerte acento italiano, contrastó con su intento de hablar mi lengua materna, aunque el dominio de éste sujeto por el español resultaba más bien mediocre....]

-Ése es mi nombre.... ¿tu quien eres?...Identifícate... [Respondí tratando de sonar todo lo convincente que pude...]

-Dispculpe mi entromisión con respecto a questo vampiro, mà... ha sobrepasado ciertos límites.... éste porco, ha estado cazando de manera excesiva, ha chiamatto demasiado la atenzione de....los civiles. Es por éso que me han mandado a aniquilarlo, aún sabiendo que la vendetta le pertenecía a usted...

-Aún no te has identificado....

-Perdon signorino, il mio nome... es Claudio Astari, rastreador de la hermandad Uffizi.. deseaba conocerle personalmente en otras circunstancias signorino... Mà, no ha podido ser... llevamos observándole desde la sua llegada a la città... siempre observamos a los vampiros que llegan aquí con el fin de que no...desestabilicen nuestro anonimato y nuestra paz con los humanos...

-Esa presa era mía... ¡ Marius Ellian era mio!... ¿no lo entendeis?, llevo 6 malditos años investigando y rastreando con el fin de dar con él, de matarlo con mis propias manos... ¿y ahora que?

-Veramente lo lamento... mà no podíamos dejarte más tiempo para tu cacería... ya te habíamos concedido demasiado...y esperaste demasiado.

[Sé que mi gesto resultaba amenazador...con los puños cerrados colgandome a ambos lados del cuerpo, mi mirada fija en sus pupilas, y los colmillos terriblemente apretados, resonando dentro de mi boca como cuchillos afilándose.... cerré un segundo los ojos con el fin de tratar de calmarme, pues de lo contrario, estaba seguro de que acabaría abalanzándome sobre aquel vampiro, y dudo que en desigualdad de condiciones yo hubiera encontrado la victoria...]
[Cuando volví a abrir los ojos, tan sólo me encontré con la enorme hoguera emanando un asqueroso olor a carne quemada... ni rastro de Claudio...
Miré en todas direcciones esperándo encontrarlo aferrado a la barandilla de algún balcon de aquellos edificios de tres plantas pero...nada....tan sólo la hoguera, y ahí ya ni siquiera se podía dar fé de que lo que ardiese fuera un cuerpo...tan solo brasas...]

Decidí volver a casa antes de que los vecinos, alertados por el olor a quemado, se asomaran a los balcones... y qué duda cabe de que por el camino...piqué algo....





23 DE JUNIO DE 2852.

No me queda ninguna motivación que me ate a Florencia. Vine aquí con la única misión de encontrar a mi cazador y matarlo, pero Claudio hizo ése trabajo por mi. Muerto el vampiro, muerta la rabia, nunca mejor dicho...
Me gustaría continuar en Italia, así que tal vez me mude a Roma... Ahora que ya no tengo nada que hacer, me apetece conocer más ciudades, más edificios históricos, a más gente...
Mi estancia en Florencia ha sido corta, pero intensa. De todas formas nunca me dió la impresión de que éste fuera mi lugar... es hermoso, pero es solo una ciudad más de cuantas petengo agregar a mi cuaderno de bitácora....

He decidido vender la casa donde he estado alojado aquí. Ésto, sumado la cantidad de liras que amasé vendiendo parte de mis obras de arte a Alessandro, debería ser suficiente para pasar una larga temporada sin preocuparme por mis ingresos. Además he despedido a mis sirvientes, por decirlo de alguna manera... ahora son libres de regresar a Inglaterra si lo desean. Por supuesto les he dado una pequeña cantidad de dinero a cada uno a modo de despedida y agradecimiento.

Me queda, eso sí, una asignatura pendiente... Conocer más acerca de la hermandad Uffizi, pero éso lo puedo hacer desde otra ciudad. Me pregunto qué misión tienen aquellos vampiros, aparte de el de procurar que ningún visitante sobrepase los límites y les delate...

Esta noche, subiré a la cúpula de la catedral por última vez, y trataré de grabar en mi memoria tan magníficas vistas...por si no vuelvo nunca más aqui.Desde ahí arriba, las presas son como pequeñas hormigas ignorantes, que desconocen que su mayor amenaza les acecha desde lo alto de su edificio santo por excelencia...
Florencia me ha marcado sobremanera. Pese a haber estado tan solo unos pocos meses... la echaré de menos.




30 DE SEPTIEMBRE DE 1853

Ha pasado ya más de un año desde mi llegada a Roma, curiosamente, en una casa de la Piazza di Spagna... bendita ironía...Durante éste tiempo totalmente liberado de odio y rencor, he tomado clases de pintura en uns escuela cercana a mi casa. Pintar me relaja, me da paz...Y además, hepensado que si me espera la eternidad, ¿qué mejor que cultivar un poco la mente y el espíritu?. En este corto espacio de tiempo he mejorado de manera sorprendente, siendo ya considerado el mejor alumno de dicha escuela, y uno de los nuevos pintores de más proyección de la ciudad.
Estas clases no solo me han otorgado paz interior, sino que además me han permitido conocer a alguien... Victoria...
Victoria es modelo ocasional en nuestra clase. Recuerdo perfectamente el día que la ví por vez primera.
Recuerdo que no pude apartar mis ojos de su boca, tan carnosa y sensual que la imaginaba con un sabor más dulce que la miel...Sus labios...tan perfectos, tan sobrehumanos...que al reir enmarcaban perfectamente unos dientes blancos como perlas salvajes.
La primera vez que la pinté, ella vestía una túnica romana blanca, y yacía recostada en un diván de seda verde botella. Justo a su lado, una pequeña columna de atrezzo que servia para ambientar y escenificar aquella farsa enla que lo único auténtico era aquella diosa romana...
Nuestras miradas, como si de dos imanes de polaridad opuesta se trataran, permanecieron fijas la una en la otra durante toda la sesión.
Recuerdo el escalofrío que recorrió mi cuerpo al trazar sobre el lienzo su contorno. Con los pechos más perfectos bajo quella túnica záfia que ni le hacía justícia, ni era merecedora de ser vestida por aquel ángel...
Sus piernas, suaves como el mármol recién pulído, y largas como auténticas columnas de un templo que, sabe Dios, yo deseaba profanar...pero no a mi manera, sino a la manera mortal.
Creo que la amé desde el primer instante en que la ví. Desde mi posición podía percibir aquel aroma a sándalo que emanaba de su cuello y pecho.
Debo confesar que la sola visión de aquel ángel recostado, me emocionó como nunca antes me había emocionado, llegando incluso a marearme y dejar escapar alguna pequeña lágrima...

Victoria debía ser mia, y yo sólo deseaba ser enteramente suyo para toda la eternidad... ahora estaba a su merced, y ella podría hacer lo que deseara con cada segundo de mi existencia...

Ahora, 4 meses después, debo reconocer que en ningún momento he sentido el deseo de alimentarme de ella, lo cual, me sorprende y me hace feliz .Parece ser que aún conservo mi alma, después de todo.
Ni en un millón de años podría concebirme alimentandome de ésa criatura celestial de 18 primaveras, con sus cabellos dorados, sus preciosos ojos verde esmeralda, y esa risa tan sincera, tan auténtica...
Victoria...grácias por entrar en mi vida...




2 DE OCTUBRE DE 1853

Es muy complicado inventar excusas para no comer ni cenar con Victoria... Evidentemente, si me viese en tal situación, tendría que fingir que me alimento, y aún recuerdo lo que pasó con los panecillos que desayuné el día de mi conversión...
Ayer estuvimos paseando por los aledaños del Coliseo, y mientras ella revoloteaba con gran entusiasmo a mi alrededor tratando de divertirme, yo estaba en otro lugar... me debatía si confesarle mi naturaleza y dejar en manos de Dios su reacción, o simplemente desaparecer un día sin previo aviso... La segunda opción, aparte de ser la más cobarde, es la que más me costaría de ejecutar.
Al fin y al cabo, Victoria me ama... es decir, si se lo confesase, ella vería que he estado 4 meses a su lado y jamás la he puesto en peligro alguno...nunca.
Vería que no tiene nada que temer, que realmente, aunque ella pudiera resultar un exquisito menú para mi, los sentimientos hacia ella que han envuelto mi corazón mantendrían totalmente controlado a mi instinto...

Una vez dejamos atrás el Coliseo, ya no pude fingir más, y mi pequeña se dió cuenta de mi preocupación... Evidentemente, no pude decirle la verdad, no en ese momento....
Ya caía la tarde cuando me insistió en presentarme a sus progenitores con la excusa de una suculenta cena., a lo cual, desde luego, me negué...
Me negué en rotundo a la cena, pero no al café...así que dos horas más tarde, y saciado ya mi apetito me encaminé hacia la casa de Victoria, tratando de superar la extrema timidez que aún latía en mi interior, prueba de que en algún momento, yo fuí humano...


8 DE OCTUBRE DE 1853

Me resulta dificil de explicar lo que he experimentado durante éstos últimos seis días.
Los padres de Victoria, no solo me recibieron con los brazos abiertos, sino que me hicieron sentir como un miembro más de aquella casa. Hacía muchos años que no sentía el calor del cariño familiar en mi interior.
Y respecto a mi amada y yo... ayer le confesé mi naturaleza vampírica... no pude soportar esa carga durante más tiempo, y finalmente opté por abrirle mi baúl de los secretos...
Por supuesto, al principio no me creyó, sabedora de mi cínico y fino sentido del humor, pero finalmente encontré un par de formas de demostrarle la veracidad de mi confesión...
He de admitir que jamás hubiera esperado esa reacción en ella... se lo tomó con tanta naturalidad como si le hubiera dicho que soy Irlandés... no hizo ni tan siquiera una mueca de horror.

En vista de que los Dioses me sonreían, decidí dar el siguiente paso planeado... le pedí matrimonio.

Así que aqui estoy, inmerso en los preparativos de una boda que ambos deseamos que sea íntima y familiar. Tan solo sus padres, Alessandro Di Tagliare, y nosotros dos.

Victoria me ha pedido que en la noche de nupcias la convierta, y tras explicarle el doloroso proceso, y hacerle entender que debería abandonar a su gente para así evitar daños mayores, he aceptado encantado.
La simple visión de Victoria y yo juntos eternamente, siendo diabólicamente jovenes a pesar de los años que transcurriesen, me pone la piel de gallina... tanta felicidad no debe ser buena.

Muy bien mi amor, preparemos tu boda soñada, y sumerjámonos juntos en las arenas del tiempo...para siempre...

19 de septiembre de 2008

capitulo 1


7 DE JUNIO DE 1850


Antes de dar comienzo a mi diario, me gustaría aclararos las mentiras que el folclore tradicional, principalmente de las historias gitanas de Rumanía y Portugal, han vertido sobre nuestra especia en un intento de hacer creer al populacho que están a salvo.
En primer lugar, la luz solar no nos afecta en absoluto, así como el agua bendita o el acto de clavarnos una estaca en el corazón. Nos reflejamos perfectamente en los espejos, así que si alguien pretende descubrir a un vampiro a través de éste método...siento decirle que está perdiendo el tiempo.
Y el gran invento de nuestra querida iglesia : Los crucifijos... Yo mismo llevo uno que perteneció a mi madre colgado del cuello, asi que... aquí queda demostrada su efectividad.

Es por todo ésto, por lo que es tan dificil reconocer a un vampiro, aún teniéndolo justo al lado.
Aclarado ésto, demos comienzo a mi diario... un diario repleto de sangre inocente.

7 de junio de 1850

Ya han pasado 4 años desde mi nacimiento en las tinieblas. Pesan sobre mis espaldas casi 700 asesinatos. Juro por Dios que intenté alimentarme solamente de animales, pero llegó un punto en el que mis instintos más básicos me vencieron, y descubrí que el torrente sanguíneo humano es, además de infinitamente más mutritivo, yambién es más sabroso, más delicioso si cabe...

Hoy empiezo éste diario, no se porqué, tal vez me sienta solo, y necesite dar fé de que un día, en un tiempo, yo existí...
Aún no se controlar mis instints de depredador, así que lo más seguro es no tratar demasiado con los humanos, con el fín de evitar que me descubran.
De los últimos 4 añoshay poco que contar, poco agradable almenos... Pasé mis dos primeros años como vampiro recorriéndo España como un nómada. Población o ciudad por la que pasaba...inocente que caía presa de mi apetito.

Recorrí desde Pontevedra, en el Norte de la pesnínsula, hasta Jimena de la Frontera, en el Sur de Cádiz. Cuántas vidas segué cual labrador prematuramente...
En Valladolid incluso estuve a punto de ser atrapado. En esa ciudad aprendí que los miembros de la nobleza deben ser cazados de forma rápida y sigilosa. Pero yo era un simple aficionado todavía. Solamente un vampiro joven cuyas ansias de alimentarse superaban al instinto natural de autoprotección... Para mí la vida era un juego, en el que cada día arriesgaba un poco más.
Decidí retirarme cuando se empezaron a escuchar historias acerca de un ángel de la muerte. Un ser tan hermoso que al verlo, la sangre se evaporaba. Evidentemente hablaban de mí, solo que con ciertas licencias artísticas.

Así, un día, sin pensarlo, me encaminé hacia Portugal en busca de nuevas presas y desconocedor de el poder de el folclore gitano y sus historias sobre seres que bebían sangre humana que existia en éstas tierras. Aunque como ya he dicho antes, sus historias no me afectaban en absoluto, ya que la sata de mentiras que vertían sobre mi raza, me hacía inmune a sus métodos de avistamiento.

En Oporto estuve investigando acerca de mi naturaleza, a través de diversos libros antiguos y pergaminos que se habían conservado de las devastadoras garras de la inquisición.
Como podréis imaginar, seguí devastando cada pequeña población por la que pasaba. Cada noche caía una nueva víctima, cada noche, porque de día las calles estaban demasiado concurridas como para hacer desaparecer a alguien, además de que había demasiada luz como para abandonar un cadáver... La noche era más segura, más silenciosa, y más solitaria.

Un dia no especialmente diferente, me llegó a oídos una cnversación acerca de nas muertes en Inglaterra, exactamente iguales que las que esaban sucenciéndose en Portugal.
Ésto em llamó la atencion poderosamente, ya que quizás , si viajaba hasta allá, podría encontrar a alguien de mi especia, y ¿quién sabe?, probablemente diera con el bastardo que me mordió hace ya 4 largos años.
En cualquier caso, Portugal ya se me había quedado pequeño, y yo ansiaba conocer nuevas presas.

Mañana sale un barco hacia las Gran Bretaña, y pretendo ser uno más de esos incautos pasajeros...

Pero antes...quizás le eche el diente a Anha Veloso, hija menor del general del cuerpo de orden de Oporto, Luciano Veloso DosPontes...será mi despedida...a lo grande.


3 DE JULIO DE 1850

Cuán diferentes son las mujeres inglesas de las españolas. Tan rubias, tan pálidas... aquí no llama tanto la atención mi aspecto, así que puedo dejarme ver más tranquilamente sin temor a despertar la curiosidad de las gentes del lugar.
He podido comprobar que una de mis nuevas habilidades como vampiro esla capacidad de absorber conocimientos en un tiempo relativamente corto... ¿la prueba? ya hablo inglés....no el inglés de el pueblo llano, lleno de vulgarismos y estupideces, sino el inglés más culto, perteneciente a la nobleza y altos rangos socales., ante as que me he presentado como un joven noble español.

Conseguir alojamiento ha resultado relativamente fácil... Después de pasar la prmera noche a la intemperie, elegí un caserío, eliminé a todos sus habitantes, tanto el señor de la casa como su familia y sirvietes, y ayer mismo contraté a un nuevo servicio, además de jornaleros para cuidar las tierras. El impresionante caserío de estilo románico tiene cientos de acres cultivados con lo que después será vendido como té, tan apreciado en éste país. Los beneficios de tal explotación agraria serán de gran utilidad a la hora de continuar con la farsa de mi título nobiliario...

Yo, Alberto Ferrer Santana, duque de la real villa de Fontinyent, pretendo infiltrarme en las más altas esferas de la aristocrácia británica, tan retorcida e ignorante , que podría decirse que me sentiré en mi salsa...
Tal vez la búsqueda de mis semejantes, que en un principio fué el motivo de mi traslado a este país, pueda esperar un poco...
Nunca he tenido nada, nunca he sido más que un humilde hijo de herrero en una pequeña villa, así que ahora aprovecharé la oportunidad que la vida me brinda, y me uniré a la que dicen, es una de las altas esferas más oscuras, taicioneras y elegantemente falsas de toda Europa...la británica.




24 DE NOVIEMBRE DE 1851

Hoy se cumplen exactamente 5 años desde mi conversión.¿Se supone que debería celebrarlo?. Llevo un año y unos meses en Brighton, Inglaterra, y las extensas tierras cultivadas que poseo ya han dado beneficios más que suculentos. Estoy considerado como el segundo mayor exportdor de té de toda inglaterra, para lo cual incluso he constituido unos tratados internacionales de exportación a América, de los cuales tengo la absoluta exclusividad.
El duque de Fontinyent es, sin duda alguna, un respetadísimo joven hombre de negocios, que ha conseguido impresionar sobremanera a la aristocrácia de media Europa, amén de un refinado y culto amante de las más hermosas y vírgenes hijas de nobles que, como abejas atraídas por la miel, forman una pequeña corte a mi alrededor en cada acto social al que acudo, y en los que escalo vertiginosamente en estima y consideración entre mis conocidos.

Podría decirse que he entablado mi primera amistad en 5 años...Lord Francesc Thompson, hijo del conde de Brighton. Francesc es un joven despierto de 22 años de edad, con el que comparto mi gusto por las historias esotéricas y por Mozart.

Tal vez me ayude a descubrir algo más sobre ése maléfico vampiro que está azotando las calles de Londres... aunque debo ser cauto ya que él, ni se imagina que mi natualeza es la misma que la de aquel depravado monstruo.

He descubierto una antigua leyenda acerca de un clan vampírico que habita, según dicen, en Inglaterra, los Stragoiu...
Un clan de vampiros Búlgaros del cual fueron exterminados todos sus miembros, excepto su líder...el temido Marius Ellian.

Segun se retrata a éste devorador en los grabados encontrados, parece que és el mismo que me convirtió hace hoy 5 años...
Ojalá pueda encontrar a ése bastardo, y sea capaz de acabar con él...








30 DE DICIEMBRE DE 1851

Marius Ellian Stragoiu... ése era el nombre del miembro alpha de el clan. Cuentan los anales que cuando acabaron con los demás miembros de la sangrienta comunidad, él escapó fuera de Inglaterra, probablemente a España, por temor a ser exterminado junto a su pequeño aquelarre.
Parece que desde entonces, nadie se ha mostrado interesado en la dificil misión de darle caza y acabar con él... claro que yo, como no podía ser de otra manera, soy la excepción...
Seguir atento al menor indicio de el paradero de Marius Ellian....

Mañana se celebra una cena de postín con el fín de despedir el año en la mansión de los padres de Francesc, la mansión de los condes de Brighton, y como suele ser habitual, la atencion se centra en mi, de mi asistencia o no asistencia, depende que acudan muchos empresarios, y personalidades políticas británicas.
Yo jamás dejaría plantado a Francesc en una situación así, de manera que ya he mandado lavar y planchar mis mejores galas....


Despues de tanto tiempo flirteando con la nobleza, me resultan aburridos, vacíos, banales.... no hay conversación o chiste que no se haya dicho ya.
Me exasperan esas estupidas reuniones sociales en las que un pequeño séquito de niñas malcriadas y presuntuosas se dedican a revolotear a mi alrededor, como si de criaturas de 5 años se trataran...

Decenas de latidos diferentes juntos en un mismo salón, decenas de texturas, olores, y sabores que ponen a prueba mis instintos. Sí, soy masoquista.....
Pero por el momento aún no he tenido ningún desliz en público. Mi autocontrol parece que se va endureciendo, éso es bueno..aunque lo que de verdad desearía es acabar con aquellas estupidas, cínicas y aburridas vidas de un mordisco...
Pero me juré a mí mismo que jamás me convertiría en un asesino despiadado... solo cazar para alimentarse, esa es la norma....

18 de septiembre de 2008

El comienzo


PRESENTACIONES
Permitídme que me presente, no tengo nombre, ya no... hace años que paso de una identidad a otra según la ocasión y el lugar...
Aunque fuí bautizado como Alberto Ferrer Santana, hijo de Santiago Ferrer y de Lucía Santana, pero de eso, insisto, hace muchos años...quizás demasiados.
Espero que éstos relatos puedan servirme para aliviar el dolor de mis múltiples pecados...
Empezaré contando el motivo, o mejor dicho, la causa, de los acontecimientos que poco a poco os iré descubriendo.
Mi historia comienza en 1846, yo era el hijo único de un herrero, en la noble villa de Fontinyent, ahora conocida como Ontinyent.
Tan solo tenía 19 años, pero en esa época ya era considerado un hombre hecho y derecho, tanto era asi, que la primavera próxima a aquel frío otoño me iba a casar con María, hija de una pareja de tenderos que vivía al final de mi calle, en el actual casco viejo de la ciudad.
Nunca fuí nada del otro mundo ; 1' 75 de altura, delgado y enclenque, de pelo rubio ceniza, con mis rizos siempre enmarañados en mi cara, ojos verde claro y cara de niño.
podría decirse que mi vida era todo lo corriente que pudiera ser la de un artesano del metal en una villa mas bien pequeña, aunque repleta de historia.
De día ayudaba a mi padre en la herrería, y al acabar mi jornada, cocinaba para ambos y limpiaba un poco la casa contigua a nuestro taller.
Una vida humilde, pero que, almenos a mi, me llenaba.
Mi padre enviudó a los 24 años de edad, ya que mi madre falleció al darme a luz, y jamás llegó a ver mi rostro, jamás me conoció, jamás...
Desde ese momento él tuvo que hacerse cargo de mi, del negocio, y por supuesto, de la casa.
A mi, particularmente, la vida me trataba bien. Eran muchas las noches que salía con mis amigos a tomar unas cervezas de cebada o unos vasos de vino en la taberna.
Fué precisamente una de esas noches cuandoel devenir de mi destino se torcería en una irónica mueca, me miraría a los ojos, y volvería mi mundo del revés.
Ésa iba a ser mi última noche...sólo que yo aún no lo sabía.


EL CAMBIO
Habíamos bebido más de la cuenta, ya que el motivo de nuestra reunión nocturna era celebrar que nuestro amigo Ernesto se casaria dentro de dos días.
La noche era fría y cerrada, muy típica del mes de Noviembre en mi ciudad, y las solitarias calles empedradas aguardaban en silencio nuestro regreso al cálido hogar,
y el nacimiento del nuevo día.
Tan sólo el eco de mis pasos sesgaba aquella impoluta calma, mientras, tambaleándome a causa del alcohol, me dirigia a mi casa, cuando repentinamente noté una presencia
a mis espaldas, no por sus pasos, que resultaban inaudibles, sino por la impresión en el suelo de una alargada sombra tras de mí, que, como si de un presentimiento se tratara, abarcaba mi zigzagueante e inestable sombra.
Quise volverme para sorprender a alguno de mis amigos tratando de sobresaltarme, pero en lugar de eso, me encontré sólo una calle vacía. Ni rastro de mi misterioso acompañante.
Volví la vista al frente para retomar mi marcha, y mis ojos se toparon con unas enormes pupilas azules. Era un azul mortecino, sin vida, casi aguamarina, que resultaban aterradores en aquella cara pálida, y esa boca entreabierta en burlona sonrisa, que dejaba a la vista unos blancos y pequeños colmillos, como los de un rapido y efectivo depredador.
Sentí una ráfaga de aire helado y acto seguido, como una media luna de dientes se clavaba en mi yugular. Se abrían paso a través de la carne y dejaban brotar la sangre a borbotones.
No recuerdo haber gritado. Tampoco haber perdido el conocimiento, pero cuando volví a abrir los ojos se encontraban conmigo Maurício y Ernesto, que al oír mi petición de socorro,
se habían apresurado en alcanzarme y ya me llevaban a hombros hasta mi casa, mientras la fachada de la iglesia de Santa María, testigo de todo lo sucedido, quedaba ya a nuestras espaldas.
Mi cuerpo aún ebn estado de shock, temblaba y se convulsionaba sobre mis pies. me ardía el cuello, y esa misma sensación de ardor se extendió rapidamente al resto de mi cuerpo, cuando, de nuevo, me desmayé.


AMANECER EN LAS SOMBRAS
Nunca supe porqué yo... ¿Porqué semejante atrocidad?. Lo que sí recuerdo es el regusto férreo de mi propia sangre en la lengua...
La mañana siguiente desperté con un voraz apetito que urgía saciar. Me levanté de mi cama y fuí tambaleándome hasta la cocina, donde ví un par de panecillos de mantequilla y un cuenco con leche azucarada. Ésto era, sin duda, obra de mi padre, que al tanto de mi ataque la noche anterior, me habia preparado algo de desayuno y me había permitido despertarme más tarde de lo habitual.
Me sente en una de las sillas de hierro forjado, y mordí uno de los panecillos. No había nada anormal en él, pero me produjo náuseas, así que bebí un trago de leche.
Inmediatamente, un ardor volcánico se alojó en mi estómago, empecé a sudar y a retorcerme y acabé vomitando lo poco que tenía en la barriga.
Me dispuse a limpiar aquel desaguisado cuando un pequeño golpeteo llamó mi atención... Era un tamborile constante y acelerado.
Cerré los ojos para concerntrar toda mi atención en descubrir de dónde provenía...
Sin darme apenas cuenta, fuí cruzando la casa hasta llegar a el patio trasero.
Continué hasta pararme justo frente al prqueño corral donde teníamos conejos y gallinas. Fué en ese preciso instante cuando noté una excesiva salivación, y sin entender porqué, me abalancé sobre un cebado conejo gris, hinqué mis dientes en su cuello, desgarrándo la carne, y engullendo la sangre que brotaba de su herida. Entonces, en un ataque de inspiración, comprendí de dónde procedía ese tamborileo...Era el latir de su corazón.
Dios...Por fín algo de paz, de saciedad, de bienestar...Chupé hasta que el corazón se paró, y con el, el golpeteo.
Abrí los ojos, y descubrí la caótica escena. Me sorprendió no sorprenderme en absoluto por lo que acababa de hacer, de hecho, me pareció algo de lo más normal.
El verdadero dilema era si podría evitar alimentarme de mi gente...Aunque algo en mi interior me decía que no.
Tal vez lo más cuerdo, dentro de esta locura, sería irme lejos, sin despedirme, evitando el contacto con mi padre, María y mis amigos...Sería lo mejor para ellos.

DESPEDIDA
Me dispuse a salir corriendode el que hasta ahora había sido mi hogar durante 19 años, rezándo por que a mi padre no se le ocurriera entrar a casa para ver cómo me encontraba, o, mejor dicho, que él no se encontrase con mi aún voraz apetito...
Cuando de repente, justo cuando me encontraba a unos pasos de la puerta exterior, ésta se abrió, y todos mis temores cobraron vida.
Me paré en seco, y retrocedí un par de pasos. M i padre esbozó una enorme sonrisa de alivio al comprobar que ya me encontraba lo suficientemente bien para levantarme.
Me estemecí, una vez más volvía a escuchar el golpeteo rítmico, e incluso el circular de su sangre a través de las venas y arterias...
Dejé los ojos en blanco ante tan placentero concierto, y un escalofrío recorrió mi espina dorsal.
Casi podía oler la sangre de aquella persona que me había dado la vida, mi vida mortal....
Os juro que lloré lágrimas que al caer por mi mejilla, quemaban como el fuego cuando me abalancé sobre él, dominado mis instintos, y clavé mis dientes en su cuello...
Ese mordisco no sólo le dolió a él, sino que también algo dentro de mí se murió...mi alma.
Y seguí alimentándome de su sangre hasta que su corazón se paró por completo...
Corrí hasta mi habitación para recoger mi unica capa, y huir así de mi pueblo sin que nadie me reconociera, pero al pasar por delante del espejo del comedor algo captó mi atención...
se suponía que ése era mi reflejo, pero era tan diferente... en lugar de encontrarme a mí mismo, en el hallé una cara pálida, con ojeras, unos ojos color aguamarina, y mi barbilla repleta de sangre...
Rompí el espejo de un puñetazo, limpié mi cara con agua,me puse la capa gris de los domingos, y salí corriendo sin mirar atrás, como alma que lleva el diablo en dirección a la montaña, huyendo de mis pecados...de mi condena, y del hecho de que había perdido definitivamente lo único que aún podía hacerme sentir vivo...mi alma.